Benoît Pioulard: crear algo hermoso, una hebra a la vez
Conversamos con Thomas Meluch sobre su proceso de composición, sus colaboraciones musicales y su relación con la marimba.
Por Vladimir Garay.
Recientemente, Thomas Meluch celebró su cumpleaños número cuarenta y decidió honrar la ocasión de la forma que mejor sabe: componiendo y grabando. Como Benoît Pioulard ha publicado una cantidad ingente de música. Su página de Bandcamp muestra más de 30 lanzamientos, incluyendo álbumes, colaboraciones y EPs, algunos autoeditados, otros bajo reconocidos sellos, como Kranky y Morr Music.
Las composiciones de Benoît Pioulard oscilan entre los experimentos atmosféricos y la canción propiamente dicha, con voz y estructura definida. Estas dos facetas serán parte del show que dará el músico en Santiago, el próximo miércoles 28 de agosto en el Teatro San Ginés, donde además se presentarán Icalma y Esqueleto.
Conversamos con Thomas a través del correo electrónico sobre su proceso de composición, su disposición a colaborar con otros músicos y su relación con la marimba.
¿Puedes contarme qué has estado haciendo durante las últimas dos semanas? Tengo curiosidad.
Hace dos semanas celebré mi cumpleaños número 40 y me he propuesto hacer algunas grabaciones para honrar la ocasión. El principal de esos proyectos es un nuevo álbum de loops largos de guitarra, que será el décimo lanzamiento de mi microsello personal, Disques d'Honoré. Probablemente salga en algún momento del año que viene.
Aparte de eso, he estado ensayando para mi show en Santiago, pasé mucho tiempo en la cocina e hice algo de trabajo voluntario para un jardín comunitario en el Alto Manhattan.
Sé que la pregunta anterior suena rara, pero tiene un motivo. En tu página de Bandcamp hay más de 30 lanzamientos, entre LP, colaboraciones, recopilaciones de EP y una presentación en vivo. Y estoy seguro de que esa no es toda la música que has publicado a lo largo de los años. En 2024 publicaste 2 LPs: Sunder —una colaboración con Offthesky— y un álbum de Orcas, tu proyecto con Rafael Anton Irisarri. Creo que es justo calificarte como prolífico. ¿Puedes contarme un poco sobre tu proceso de composición y cómo has logrado hacer tanta música?
Es casi como el aire que respiro, pero va y viene en oleadas. El álbum de Orcas tomó casi 6 años de principio a fin, y durante ese tiempo publiqué dos álbumes en solitario para Morr (Sylva y Eidetic), así como muchos otros lanzamientos propios en ediciones limitadas. También hago una nueva pieza exclusiva para mis suscriptores de Bandcamp cada mes. Vengo haciéndolo desde 2018, así que ahí hay unas seis horas más de música.
Escribir canciones con voz, letras y estructura lleva bastante tiempo, pero el trabajo instrumental es mayormente improvisado, con una aproximación de que la mejor idea es la mejor, por lo que tiende a completarse bastante rápido. Sin embargo, todo surge de la misma intuición que he estado desarrollando durante unos 30 años. ¡Es una locura decirlo!
Has publicado música con diferentes sellos discográficos importantes, como Morr Music y, por supuesto, Kranky. Walter, la otra mitad de Camino del Sol, quiere que te pregunte sobre tu experiencia con Kranky. Y, de forma más amplia, ¿te relacionas de forma diferente con los distintos sellos discográficos?
Kranky ha sido genial conmigo a lo largo de los años, y todos los demás artistas que del sello que conozco sienten lo mismo. El Sr. Kranky —que ha estado al mando desde 1993— es una persona poco común: es justo, diligente, completamente honesto y siempre puntual con los cheques de regalías. Su exsocio en el sello, Bruce Adams, escribió un libro el año pasado, You're With Stupid, que detalla el origen de Kranky como una especie de "anti-sello", en el sentido de que la música y los artistas siempre fueron considerados primero, en lugar de las ganancias o el perfil público.
Haces muchas colaboraciones. ¿Qué es lo que te atrae a trabajar con otras personas? ¿Qué tienen en común tus colaboradores? ¿Y qué puede arruinar una colaboración musical?
Siempre surge de un lugar de admiración mutua. Luke Entelis (Viul) es uno de mis mejores amigos y ex compañero de banda, por lo que la colaboración que hicimos para A Strangely Isolated Place en 2022 (Konec) era casi inevitable; de manera similar, conozco a Rafael Irisarri desde 2009 y somos como hermanos, por lo que trabajar en el proyecto Orcas siempre es una experiencia enriquecedora y divertida para mí, ya que él sabe mucho más sobre producción que yo.
Las personas con las que he colaborado tienen estilos propios muy distintos, por lo que es un desafío gratificante encontrar la manera de integrar las diferentes partes en un todo cohesivo, que se justifique a sí mismo.
En general, parece que el ego es lo que más puede arruinar una colaboración, cuando los roles se vuelven demasiado dispares o si una persona es aplastada por la otra.
«El mundo es bastante estresante, por lo que cualquier cosa que pueda aportar una sensación de calma y serenidad siempre es bienvenida».
Leí que empezaste a tocar la marimba a los 13 años. Es un instrumento inusual, especialmente para un niño de 13 años. Imagino que hay una historia ahí. ¿Puedes contarme cómo descubriste la marimba por primera vez y qué te atrajo de ese instrumento en particular? ¿Fue el sonido, la forma en que se toca el instrumento o algo más? ¿Todavía lo tocas? ¿Tienes una marimba?
Estaba tomando clases de batería en la universidad cerca de mi ciudad natal y mi profesor también tocaba la marimba, así que me sugirió que lo intentara, ya que también había estado tomando lecciones de piano desde los cinco años.
Le dediqué un año completo, hasta el punto de poder tocar con cuatro baquetas, pero nunca di ningún recital ni nada, y estoy seguro de que ya he perdido todas esas habilidades. Sin embargo, es un instrumento que suena hermoso. También adoro el vibráfono, pero, como vivo en un apartamento de Brooklyn, no tengo espacio suficiente para nada de eso, lamentablemente.
En los últimos años, ha habido un aumento en la popularidad de la música ambient y sus subgéneros. Como alguien que ha trabajado en ese estilo, ¿a qué cree que se debe? ¿Qué descubrió el oyente actual de música ambient que las generaciones anteriores pasaron por alto?
No me corresponde especular, pero personalmente aprecio las obras ambient que pueden fomentar una concentración profunda, pero que también son adecuadas para la vida cotidiana; no "fondos de pantalla sonoros" como dirían los cínicos, sino obras tonales y compositivas adecuadas que tienen bordes ligeramente suavizados y texturas interesantes. Creo que, debido a la "lista de reproducción infinita" que servicios como Spotify generan automáticamente, es fácil poner un álbum y dejar que la música suene, básicamente para siempre.
Además, no importa dónde estés, el mundo es bastante estresante, por lo que cualquier cosa que pueda aportar una sensación de calma y serenidad siempre es bienvenida.
Además de multinstrumentista, eres escritor y fotógrafo. ¿Cómo abordas la relación entre imagen y sonido, y sonido y palabras? ¿Cómo crees que se refleja en tu trabajo?
Tengo una licenciatura en estudios cinematográficos, así que siempre me han atraído las posibilidades de las combinaciones audiovisuales; para mí, ambas son difíciles de separar y, en parte por eso, estoy tan decidido a crear una identidad visual analógica bastante específica que vaya con mi trabajo musical.
Crecí con una madre que tejía a mano, así que desarrollé una atracción natural por las texturas y las cosas táctiles, así como por los aspectos manuales de la urdimbre y la trama. Ya sabes, crear algo hermoso, una hebra a la vez.
¿Qué puede esperar la gente de tu show en Santiago?
Será mi primer show en un tiempo, estoy preparando un par de canciones que nunca he tocado en vivo y espero encajarlas en un set mayormente continuo, balanceado entre drones en loop y piezas vocales.
¿Puedes recomendar tres discos a nuestros lectores?
Mis favoritos más recientes han sido This But More de Priori, It Means A Lot de Ulla & Ultrafog y Searching de James Devane.
Benoît Pioulard se presenta en Santiago el próximo miércoles 28 de agosto, junto a Icalma y Esqueleto. Entradas disponibles a través de Ticketmaster.